Me gustó ayer esta reflexión de Joaquín Luna en La Vanguardia.
Banalizar la reflexión racional es lo que tiene. Como en las películas del oeste en las que primero se dispara y luego se pregunta, hemos desembocado en "primero posteo (disparo postas de opinión ) y luego ya si eso, reflexiono (en general para justificarme).
Volver al blog. Dedicarle algo de tiempo estos días de verano en los que disminuye el ruido y la presión ambiental. Darme cuenta de que no he mantenido ninguna de las promesas de las anunciadas nuevas etapas. Probablemente tampoco esta. Al menos sirve para comprobar las inquietudes de uno hace tiempo.
No sé como alimentaré este repositorio. A lo mejor me limito a almacenar todo lo que me va interesando por las redes y que ahora conservo en otros lugares. Ya veré.
De momento voy a limpiar y cambiar el formato. Y a ver si me animo a subir asuntos, aunque sea a borbotones,...como la vida misma.
Agrupar en un listado las pobres lecturas que a uno le dio tiempo a consumir entre siesta y siesta. Descanso del cuerpo y del pensamiento. Marasmo de las tardes de verano.
¿Existe la suerte? Nassim Nicholas Taleb
¿Qué es esa cosa llamada ciencia? Alan F. Chalmers
Cádiz Benito Pérez Galdós
El cazador de estilemas Alex Grijelmo
En el culo del mundo António Lobo Antunes
Juan Martín el Empecinado Benito Pérez Galdós
La batalla de los Arapiles Benito Pérez Galdós
Todos los cuentos: 6 (Compendium) Raymond Carver
Un armario lleno de sombra Gamoneda, Antonio
Amor Intempestivo, Rafael Reig
Los propósitos a veces descarrilan con la velocidad de los acontecimientos o la falta de pericia del conductor.
Así, mi idea de reactivar un blog coincidiendo con la puesta en marcha de una nueva etapa profesional se ha ido retrasando y retrasando.
Tal vez requería el mismo tiempo de maduración que está pidiéndome el reciclaje personal y profesional. Tiempo de estudio, de reordenación de tareas, de aprovechar más los momentos familiares y de ir estructurando y depurando el proyecto inicial.
También y tal vez lo más importante: vencer el pudor a publicar los pensamientos propios. Rodeado de estímulos, de opiniones ajenas, de redes sociales, tertulias radiofónicas, gritones televisivos y demás, ....me parecía que mi mejor contribución al bienestar era el silencio.
Pero callar parecería una forma de asentir y si uno está en el mundo es para socializar. La tribu es hoy digital más que catódica. Me convenzo de que escribir en la red es una continuación y no una renuncia a la lectura, a la conversación cara a cara o al pensamiento en profundidad.
En adelante procuraré insertar dos tipos de entradas, una más profesional referida a mi futura actividad como abogado (aún estoy colegiado como no ejerciente) y la otra más personal, en forma de resúmenes de lecturas o reflexiones que excedan los 140 caracteres (mi cronología de twitter se puede ver en este blog, o seguir en @joseurmartinez)
jueves, 11 de julio de 2013
La vida no puede ser sólo un tiempo que hay que recorrer...
Algún día pensaré, leeré e intentaré poner negro sobre blanco mis ideas sobre la música popular y su función poética en el siglo XX.
De momento, me conformaré con pinchar en este blog, como en panoplia de recuerdos, algunas de las canciones que me han marcado, las que despiertan algo dentro de mí, sean sueños o recuerdos.
¿son todas tristes? Alguna me dice que sí.
Hoy me sorprendí emocionándome con esta versión de Pablo Milanés de Libertad de Aute, en el disco que grabaron estupendos artistas titualdo "Mira que eres canalla, Aute" en el que la mayoría de las versiones brillan a un nivel mucho más alto que el original. Dicho sea con respeto a la verdad, tanto Aute como Joaquín Sabina puede que sean de los mejores autores de canciones de este encabalgamiento de siglos, pero las limitaciones canoras de ambos son evidentes.
Me tocó la fibra la primera estrofa de la canción, ya que estoy en un periodo de metamorfosis , (ojalá de epifanía), en este "deber de no claudicar" que es la vida.
Y van pasando los años
Y al fin la vida no puede ser
sólo un tiempo que hay que recorrer
a través del dolor y el placer;
quién nos compuso el engaño
de que existir es apostar a no perder.
Vivir es más que un derecho,
es el deber de no claudicar
el mandato de reflexionar
qué es nacer, qué es morir, qué es amar.
el hombre, por qué está hecho
y qué eres tú, libertad,
libertad, libertad, libertad.
La idea no es razonable,
tampoco el verbo fundamental;
¿es el alma principio o final,
o armonía del bien frente al mal?
qué es el amor insondable
que empuja al cuerpo a ser incógnita
inmortal.
El siglo está agonizando
y el testamento que va a dejar
es un orden que quiere ocultar
el preciso compás del azar;
a qué seguir respirando
si no estás tú, libertad,
Libertad, libertad, libertad.